Recientemente, Argentina decretó una “Emergencia Energética” hasta fines de 2024, abarcando los segmentos de generación, transporte y distribución de electricidad y gas natural.
Esta medida responde a la obsolescencia creciente de los activos de las empresas energéticas, la insuficiente adecuación a la demanda actual y futura, y la falta de inversiones en renovación y ampliación de redes.
Además, se ordenó una revisión tarifaria integral, con el objetivo de establecer tarifas que entren en vigencia antes del 31 de diciembre de 2024, y se autorizó la implementación de adecuaciones transitorias y ajustes periódicos en los cuadros vigentes.
El decreto también contempla la intervención de los entes reguladores del sector, ENRE y Enargas, a partir de enero de 2024, hasta la designación de los nuevos directorios. Los interventores tendrán como misiones informar sobre el estado actual y renegociar tarifas con participación ciudadana, considerando recomendaciones previas de revisiones tarifarias y contratos de concesión.
En qué me puede afectar la Emergencia Energética
En términos prácticos, esta emergencia implica la posibilidad de aumentos significativos en las tarifas de luz y gas. Hasta que se complete la revisión tarifaria, se podrán aprobar ajustes transitorios de tarifas.
Actualmente, existe una Segmentación Energética, donde sectores de ingresos bajos y medios reciben tarifas subsidiadas, mientras que los de altos ingresos pagan tarifas sin subsidio.
La Secretaría de Energía ha sido instruida para establecer mecanismos que sancionen precios en condiciones de competencia y libre acceso, manteniendo los niveles de ingresos y cubriendo las necesidades de inversión para garantizar una prestación continua de los servicios públicos en condiciones técnicas y económicas adecuadas.
Contexto de la emergencia
Esta emergencia se da en un contexto de cortes masivos de energía en varias zonas, atribuibles a la obsolescencia de activos y la falta de adecuación a la demanda.
La Secretaría de Energía ha enfatizado la necesidad de adoptar medidas que permitan la continuidad en la prestación de los servicios de energía eléctrica y gas natural y asegurar un suministro adecuado a toda la población. Más de 110 mil usuarios de Edesur y más de 70.000 de Edenor experimentaron cortes de energía, evidenciando la urgencia de estas medidas.
Objetivo de largo plazo
En resumen, la emergencia energética en Argentina busca enfrentar desafíos críticos en el sector energético, equilibrando la necesidad de inversiones y renovación con la protección de los derechos de los usuarios en un contexto macroeconómico complicado.
Aunque esta decisión podría resultar en aumentos tarifarios, también busca garantizar la calidad y continuidad del servicio energético a largo plazo.